La famosa fiesta de “Halloween”, en realidad, proviene de All hallow’s eve o bien All Hallows Evening, que significa “víspera de Todos los Santos”, aunque por desgracia se ha ido desvirtuado con el paso de los siglos y así, actualmente, esa celebración tiene elementos que en nada remiten ya a la fiesta que le dio origen y no tiene ninguna relación con la fe cristiana y con la santidad. La forma que tiene Halloween de plantear la vida y la muerte, el bien y el mal, son completamente distintas a las del Evangelio de Cristo y a la Tradición de su Iglesia, dejando de ser, por tanto, una fiesta cristiana. Por eso, los católicos queremos devolver a este día su verdadero sentido y celebrar a todos aquellos que están ya con Dios por haber seguido heroicamente a Jesucristo, con una luminosa fiesta de Todos los Santos que desborde alegría y esperanza, sabiendo que nuestra vida es grande, bella y digna y que nuestra meta es el Cielo.

“Holywins” es un juego de palabras con los términos holy (santo) y wins (gana), es decir, “la santidad vence”: los santos triunfan frente al mal que, de forma a menudo inconsciente, muchos celebran esa noche. La analogía fonética con la palabra “Halloween” no es fortuita, pues Holywins pretende festejar con todos -niños, jóvenes y adultos- la llamada universal a la santidad reforzando la fiesta cristiana de Todos los Santos, verdadera celebración del 1 de noviembre y de su víspera, ante la potente implantación y colonización de la fiesta pagana de Halloween que sufrimos en nuestra cultura.

«Como cristianos, no queremos compartir el culto a la muerte, al terror y la exaltación de lo monstruoso o feo que conlleva, pues lo propio de los cristianos es celebrar el triunfo de la vida y promover la belleza, la luz y el bien» «Holywins es un testimonio de esperanza cristiana ante la muerte, una oportunidad para hablar de los santos y llevar la alegría del amor de Dios por todos a la calle.

«No se trata de «demonizar» Halloween»,  «sino de mostrar el verdadero sentido de la fiesta del 1 de noviembre, solemnidad de Todos los Santos y darle realce.

El 31 de octubre el cielo está de fiesta. Por ello, frente a los disfraces tétricos y sanguinolentos de los muertos vivientes que llenan nuestros colegios y calles, os invitamos como profesores de religión a sumaros a esta celebración de Holywins, y  transmitir un mensaje muy claro: la vida es hermosa y su meta es el Cielo; son muchos los que ya han llegado y todos estamos llamados a compartir su felicidad, pues todos podemos -y estamos llamados- a ser santos.

AQUÍ PUEDES CONSULTAR IDEAS Y RECURSOS PARA ESTA PRECIOSA CELEBRACIÓN.